Existe algo más rico que unas papas o patatas fritas frescas, crocantes y nada aceitosas? Acá algunas sugerencias para preparar papas o patatas fritas que no tendrán nada que envidiar a las de los restaurantes de comida rápida.
La elección de la papa
La primer cosa a tener en cuenta es utilizar una variedad de papa que sea para freír. La papa rosada es perfecta debido a que tiene un bajo contenido de almidón.
El corte
Pelar las papas (aunque fritas con cáscara quedan muy ricas). Cortar en bastoncitos, rodajas o como prefieras pero siempre de tamaño similar para que tengan una cocción pareja.
El lavado
Dejarlas sumergidas en un bowl con agua bien fría o en agua con hielo durante 10 minutos. Luego enjuagarlas con agua natural para eliminar todo el almidón que pudiese quedar.
El secado
Secar bien con un trapo limpio o con papel de cocina.
El aceite
Utilizar abundante aceite de girasol para freír.
La temperatura
Controlar la temperatura del aceite sumergiendo un bastón de papa. Si hace burbujas alrededor y la papa emerge en menos de 5 segundos la temperatura es la ideal para freír (175º/180ºC).
Cantidad
Freír de a poca cantidad ya que bajará la temperatura del aceite.
El dorado
Mezclar con mucho cuidado de tanto en tanto, para lograr un dorado parejo.
Escurrido y salado
Escurrirlas en papel absorbente para eliminar el exceso de aceite y salarlas sólo antes de servirlas, para que no se ablanden.
